Leonardo Sbaraglia nos hizo estremecer en Relatos
Salvajes, nos hizo llorar en Caballos
Salvajes y en otras innumerables
películas que llegaron a nuestro corazón: Las viudas de los jueves, Plata
quemada. Además es ganador de varios premios, entre ellos el Goya. Viene trabajando ininterrumpidamente desde
hace treinta años y lleva filmadas más películas que la edad que tiene. Esta vez se pone en la piel de Ramón Alvia, y
abraza el mundo del box.
Eva De Dominici, con 21 años, ya pasó por
Chiquititas, Patito Feo y Consentidos. Fue modelo en varias campañas de ropa de
marca. Ha trabajado en televisión desde muy joven y con esta película hace su
primer protagónico en cine.
Los une el film que dirige Hernán Bellón, con
guión de el mismo y Marcelo Pitrola: “Sangre en la boca”, adaptación del cuento
homónimo venezolano Milagros Socorro, cuyo
estreno es el 25 de agosto. La post producción se hizo en Roma. Fue distinguida con el Premio José Luis Díaz /
Tauro de posproducción de sonido y la adquisición de INCAA TV.
Ramón Alvia (Sbaraglia) es un boxeador profesional
que está al final de su carrera. Su esposa y sus hijos pretenden que se retire
y se dedique a otra actividad. Él se resiste, piensa que es joven y que puede
seguir. En el gimnasio, Ramón descubre a Deborah (Eva), una bella y joven
boxeadora. Seducido por la fuerza salvaje de ella, Ramón siente que recupera
todo su vigor. Abandona a su familia y se enfrenta con su manager, entregándose
a una relación pasional en la que el placer y el dolor están íntimamente unidos
y la violencia aumenta en cada round.
Fui invitada a la premier y conferencia de
prensa, donde conversamos con los
actores.
Leonardo, toma asiento en primer lugar. A su lado,
el director de la película y la protagonista femenina. Trajo su termo y su
mate, “no voy a dejar el mate” dijo. Así que se pasó el tiempo de la
conferencia de prensa cebándoles a sus compañeros y tomando. En los extremos de
la mesa, estaban ubicados la boxeadora que actuó junto a Eva, Erica “Pantera” Farías, Grace Spinelli
(productora) y Nicolás Carreras (productor).
Comenzó hablando el director, quien indicó que la
película se pensó hace seis años, y recién fue terminada el año pasado (2015).
Es una coproducción con Italia y el equipo fue espectacular.
Al director: ¿Cuándo escribís un guión o lo
adaptás, ya sabés a qué actores vas a convocar?
Esta película en
particular fue pensada para Leo. Yo había hecho con él “El campo”. Además de
ser mi amigo me gusta su manera de trabajar. Podemos experimentar, buscar el
personaje y construirlo, a partir del entrenamiento y los ensayos. Fue un lujo
contar con él.. Es adaptación de un cuento venezolano que se llama “Sangre en
la boca”. El coguionista es Marcelo Pitrola.
Necesitabamos una actriz de alrededor de veinte años, y milagrosamente,
viendo el material de otra actriz, vi a Eva, de espaldas , y por la forma de
hablar, de moverse y decidí que era ella.
En el casting nos dimos cuenta que
ella era Debora. Es maravillosa y grosa.
Eva, ¿cómo fue tu preparación física y si viste
alguna película relacionada con el boxeo para hacer ésta?
Si, vi algunas
pero lo más importante fue el entrenamiento con Leo, con Fernando Muñoz, con
Hugo Chavez, con quien nos entrenamos dos meses, Leo un poco antes, en forma
diaria, boxeo, gimnasia. Muy duro al principio, fue un gran cambio para el
cuerpo. En Leo veía mucho más el
progreso y quería alcanzarlo.
Al director: En una película de boxeo, el sonido
es importante, ¿qué opinás de eso?
Yo empecé como
montajista. Me gusta trabajar con el sonido. La fuimos armando con mucha gente.
Inicialmente íbamos a hacer el sonido en Italia, pero en “Ventana Sur “el año
pasado ganamos el premio a la Post
producción de Sonido y pudimos contar con José Luis Díaz, para mí el mejor sonidista de Argentina.
Sonorizamos cada golpe, cada ruido y armamos todo de tal forma que fuera
impactante. Los boxeadores al no pegarse de verdad, tiene que ver el sonido con
el ruido de los golpes. El Fonex se hizo en Cinecitá Italia, pero acá se hizo el resto en cuatro meses.
A Leo: Sé que sos intenso para preparar un
personaje, ¿Qué hiciste vos para buscar ese personaje del boxeador más allá del
entrenamiento?
El entrenamiento
fue importante. Te va cambiando el cuerpo. Sentís diferente, más fuerte, eso
ayuda. Lo mismo al bajar o subir de peso con un personaje. Se trabajó con
observaciones de la gente que nos iba entrenando, como Chavez, con quien
conviví cuatro meses, y muchas cosa de el y su mundo, su candor, es un tipo muy
lindo como persona igual que sus hermanos.
Fuimos a ver
peleas, nos metimos mucho en eso, lo que pasaba con la gente, cuando llegaba el
boxeador. Tuvimos la suerte de conversar con Locomotora Castro, que nos recibió
en su casa y nos contó cosas de él y su vida, y su fans, muy generoso en todo.
Es una
experiencia muy diferente. Me gusta actuar, así que me gusta todo, si se cuenta
una buena historia. Tiene algo muy rico el cine, uno puede trabajar más
intensamente el personaje los tiempos son diferentes, tuve más tiempo para
llegar más preparada. Mucho ensayo. Tuvimos ensayos en las escenas de
intimidad. En la tira uno arma el personaje y luego se encuentra con el resto
de los personajes. Es diferente. Llegás preparado de otra forma. El personaje
llegó en un momento muy lindo para mí.
Fue un quiebre como actriz. La intensidad fue mucha. Ni bien leí el guión quise
hacer ese personaje. Tuve ganas muy hermosas, no sabiendo nada de box… las
ganas de salir adelante como el personaje. Lo lindo es que el personaje no piensa, primero hace y no
piensa, le da algo muy honesto a ella. No piensa en las consecuencias. Es
tierno, a pesar de estar metida en ese mundo que no es tan tierno. Prepararme
tanto físicamente fue muy importante, entrar en ese mundo, conócelo…
A Leo: ¿La película habla del debacle del boxeador?
El boxeador no asume
que debe dejar de pelear, porque toda su vida hizo eso. Muchos pasan al puestos técnicos, a entrenadores, en este caso
no lo asume.
Hay una
posibilidad de hablar a través de esta cosa extrema, que tiene que ver con el
paso del tiempo. No penetrar y dejarse llevar en una crisis, en todo caso
sublimarla, en fantasías, ilusiones. Ramón se ilusiona porque cree que puede
empezar de nuevo algo, y no es así, Se va a pegar contra la pared.
Al director: ¿Habrá una segunda parte de la
película?
No creo que haya
una secuela, el regreso de Ramón… Hay varias historias dentro de una, la que
encarna el actor Claudio Rici, que se convirtió al evangelismo en la cárcel,
luego de ser boxeador y es entrenador. La historia del padre de Débora a quien
mató la policía. L opción para Ramón es la mejor, creo, y hay un caer de una
manera violenta, pero tal vez tenga otra chance, de recuperarse el
protagonista. L cuento venezolano tiene otro final, como dije, pero pensamos
que no estaba bueno, y le dimos una chance a ella para seguir con su carrera.
A Leo: Tu personaje es autodestructivo, como tal
vez el de algunos boxeadores. ¿Qué encontraste en tu personaje?
Hay muchos casos.
No se puede generalizar. Erica puede ayudar en la respuesta. Tiene que ver con
que es una profesión que tiene implícita la violencia. No es el caso de Diego,
pero algunos comienzan a boxear por violencia intrafamiliar. Es una realidad
generalizada, mucha violencia de padres
a hijos, violencia infantil. En caso del protagonista, la tiene posiblemente
internamente. En este caso, es funcional al personaje. No hay que hacer generalizaciones.
Por ejemplo el caso de “Maravilla” Martínez, que hace algo que no tiene que ver
con el boxeo. El caso de Tyson, que ha logrado, a pesar de tener una vida
tremenda, dar una pirueta en el mundo
con un stand up sobre su vida, y pegando a través de la palabra. En el caso de
la película, no asume las cosa, por no tener los elementos, hay evidentemente
algo que no puede resolver. El puede volver a desear, a amar, y esos elementos
están desplegados ahí.
El personaje seduce, al ser campeón adquiere una
pasión, y debe haber sido interesante saber sobre esa “hamaca”. Le pregunto a
Erica, (boxeadora que participó en el film) ¿cómo domina eso de la violencia y
el sueño de salir adelante y el estímulo por ser?
EL boxeador
siempre busca algo. Es la lucha interna diaria. Es ser especial, subir a un ring y golpear a otra persona. Es
un estilo de vida que el boxeador elige, comprometerse como profesional. Uno
debe tener sueños, proyectarse, y lo canalizamos a través del ring, la
impotencia se descarga en el entrenamiento, la lucha, la pasión. Es ser apasionado
en la vida, y más allá de que nuestras manos son una herramienta arriba de un
ring, están el compromiso y la pasión.
Al director: La escena del boxeo, ¿se filmó en
Avellaneda?
La exhibición se
filmó en Bella Vista en un galpón. El resto en La Boca, Barracas, Bella Vista,
San Telmo, la zona sur. Hay citas y decorados donde ocurre Gatica, una de mis
películas favoritas. Me gustó usar algunos decorados que había usado Favio.
Quise darle fuerza, intensidad. El puente, la esquina.
¿Es igual el argumento al cuento?
El cuento es más
corto y tiene otro final. No quise darle el
mismo final.
Esta película reflexiona sobre las parejas. Donde la sexualidad está muy
presente. Quisiste dar esa imagen?
El territorio de
la pareja me interesa. Solo se ve la superficie, el sexo ahí es central.
También lo era en“El campo”. Hay violencia en la sociedad y en las parejas, se
dirimen cuestiones de poder, me pareció interesante explorar eso, más cuando la
pareja trabaja con la violencia. El boxeador quiso aprovechar la fuerza de
ella, y ella el poder de él. No hay algo más. Es una pareja particular.
¿Por qué elegiste ese cuento venezolano habiendo
tanta historia boxística en nuestro país? No lo estoy cuestionando, solo quiero
saber qué te atrapó de esa historia.
En un momento me
contrataron para realizar unos trabajos sobre cuentos latinoamericanos en Caracas,
para National Geographic, y me encontré con este cuento de Milagros Socorro. Se
hizo un corto sobre este tema y a partir de ahí, me pareció que sintonizaba con cosas que me
interesaban contar. Que estaba bueno para un largometraje. Un camino que se
inició con ese cuento… conocí a la autora y se trabajó con esa idea.
GRACIAS EVA! |
La película tiene un buen argumento. Intenta
mostrar las pasiones de los humanos, dentro del marco del boxeo con y sin sus
defectos.
Desde ya, con la calidad de actores y el buen
trabajo del director, es recomendable. Las escenas de sexo son necesarias, no
sé si tantas, ya que contribuyen al desarrollo de la trama.
Agradezco a Constanza de Raquel Flotta Prensa
& Comunicaciones.
GRACIAS LEO! |
©Silvia