jueves, 10 de septiembre de 2015

SEGUIMOS CUMPLIENDO...


Mañana cumplo años. Un año más, un año menos…no sé.
Mucha gente a la edad que yo cumplo, moría hace unos siglos atrás, otros tantos ni llegaban. La cosa es que hoy me siento como rara… Cumplo años. Hago un breve balance de mi vida y creo que no hice las cosas tan mal.

Me enamoré de un Hombre fabuloso (si, con H mayúscula).Tuve dos hijos preciosos, sanos, inteligentes, dos padres que hicieron lo imposible para darme todo lo que pudieron, mucho más de lo que ellos tuvieron.

Tengo una casa y un perro que me sigue como una sombra.


Tengo salud, trabajo y un par de ojos que abro todos los días para ver qué me depara la vida.
También tengo manos, que hacen quehaceres, que acarician, que escriben, que gesticulan, que secan sudor y que hablan. Si, a veces hablan, pero no me doy cuenta.


Con mi amiga Claudia



 Tengo vidrios en mis ventanas, tengo calefacción en invierno, refrigeración en verano.
Tengo un plato de comida todos los días sobre la mesa y puedo elegir qué comer.
 Tengo también un cerebro que almacena información desde que comencé allá cuando tenía 5 años el primer grado (pobre…debe estar muy cansado ya). 
Recuerdo el primer “mamá” de mis dos soles, el primer “te amo” y el último regalo que recibí para el día del niño.

Aprendí a manejar, aprendí a nadar bajo el agua (aunque me da un poco de cosita).


Pity (La Franela- ex Piojos)

María Fiorentino, actriz

Donato

Diego Gentile- Eduardo Blanco



Tengo imaginación ( no sé si mucha) pero al menos me sirve para contar historias y escribir poemas. Planté un árbol, escribí tres libros y tuve dos hijos. Pero ojo, con eso no me conformo. Voy por más, me queda mucho por hacer…



Pancho Aquino




También puedo peinar mi cabello, un poco plateado por la nieve, pero está. Puedo reír, puedo sentir, sufrir, amar y divertirme. Puedo darme el lujo de llorar cada tanto…porque cada tanto hace falta. Puedo recordar gente amada que ya no está. No está presente pero sigue estando en mí.






Puedo cerrar los ojos y recordar cuando a los cinco aprendí a leer los carteles del subte y el tren. ¡Cómo me gustaban los globos con gas y el sandwich de miga de la Estación Lacroze! Los juguetitos y el minihelado de Casa Tía…las mielcitas que compraba a la salida del colegio primario y los confites que me daba la máquina a cambio de una moneda ...




Carlitos Balá

Me encantaba pasar debajo del molinete del subte y no pagar pasaje cuando acompañaba a mamá al centro.

Me saqué la sortija en la calesita varias veces, porque el dueño era amigo de mi papá…
Fui la mejor alumna en primer grado, me llevé materias en el secundario, pocas… Terminé de estudiar inglés, aprendí a hacer muñecos de tela, y a pintar cuadritos! (increíble)…

Pude tejer un pulover para mi marido y escarpines para mis hijos. Abracé a alguien que sufría mucho, hasta calmarlo.
Recuerdo  mi primer beso, y el último de hoy. Recuerdo cómo me gustaba ir a bailar, sentía la música…

La pasaba mal cuando tenía prueba de matemática, siempre odié restar, desde primer grado. Me gusta sumar, , me gustan las letras: soy más amiga de ellas que de los números.

Me gustaba  leer “Mujercitas” una y otra vez: esa declaración de amor de Laurie a Jo. Me encanta releer “El Principito” y poder haber estado en la habitación de su autor, en la playa…
Conocí gente linda, por fuera y por dentro  y otros no tanto. Pero todos fueron importantes en mi vida para algo. Conocí la pasión, el amor, y también la solidaridad cuando la necesité.


Puedo suspirar, caminar, elegir un regalo. Puedo soplas cuantas velitas quiera, sin que nadie se ría de mí. Puedo darme el gusto de elegir el adorno de mi torta, de comer chocolate y de tomar café con crema. Puedo oler las flores en septiembre, regar el pasto y ver cómo se llena de pimpolos mi jazminero.

Conocí gente famosa, algunos no tanto. Fui a la cancha por primera vez, a la de Racing. 
Tuve un primer auto, y un segundo...gracias a quien me ama mucho y me los regaló. Vi nevar en Buenos Aires.

Tengo familia, padres, esposo e hijos, a quienes gracias a Dios veo crecer. Eso ya lo dije. Lo repito porque sé que los tengo y que no me faltan. Y tengo amigos, pocos pero buenos, los que siempre están.


Cada día aprendo cosas nuevas, me sorprendo con muchas y me aburro con otras.

Volé en parapente hace diez años, subí a un avión hace más de veinte, y nunca más. Recorrí el lago Nahuel Huapi en helicóptero. Me falta subir a un globo aeroestático y tirarme desde un avión en paracaídas, y me falta recorrer París, Galicia, Nueva York y el Caribe. 

Me falta bailar salsa con un negro. Salí en un programa de cable, en varias radios y revistas y en el diario ( y no en policiales). Emocioné a varios que leyeron mis poemas y mis cuentos. A veces le saqué una sonrisa a alguien enojado.
Aún no bucée…eso me da un poco más de miedo, pero quien dice… No bailé con delfines, ni les di de comer . Ni fui copiloto de mi marido en un auto de carrera. Me falta…pero tengo tiempo de hacerlo todavía.

Me falta, sé que me falta mucho  y lo voy a hacer. Voy a vivir hasta el último suspiro con la imagen de la primera vez que vi a mis hijos y con la cara de mi marido cuando me dijo que le gustaba mucho.

Mañana cumplo años, y creo que…no hice tan mal las cosas. Aunque sé que a veces me mandé alguna que otra travesura, pero …como mañana cumplo años, me las perdono.


Mañana cumplo años y lo festejaré con la gente que quiero cerca de mí.





Silvia 51 años




















Que los cumpla feliz…que los cumpla feliz…Feliz cumple para mí!




Silvia 

Septiembre 2015



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