Concurso Camila Nievas- Premios 2018

En 2017, se realizó la convocatoria, como hace varios años ya, de los Certamenes que organiza el Centro Cultural Rosalía de Castro, dirigido por la escritora Stella Maris Latorre.
Esta vez el tema era la vida de la maestra Camila Nievas, entrerriana. EN un prinipio, los premios se iban a entregar en la ciudad de Gualeguaychú,pero dada la participación de mucha gente de Buenos Aires, nuevamente la entrega será en el histórico Café Tortoni.

Me sorprendí gratamente hace unos días, cuando la sra Stella Maris, publicó los ganadores de Poesía y Cuento, cuyo jurado es la famosa escritora Poldy Bird.

En Poesía, obtuve el Tercer premio, con el poema "Camina Nievas, ejemplo"
En Prosa, obtuve "Segunda mención de honor" con el trabajo "La carta"

Hacía un tiempo que no participaba en certamenes y me decidí a hacerlo a último momento ya que tuve que investigar un poco acerca de la vida de esta interesante mujer entrerriana.
Me halaga que una escritora como Poldy Bird haya elegido mis trabajos. El día 10 de marzo estaré allí presente para deleitarme con sus palabras y por supuesto recibir los premios. 

Me emociona mucho en especial ya que utilicé el seudónimo "Encarna" para mis trabajos. (Gracias, tía, desde donde estés)

Agradezco también a la artista plástica Teresita Martí, por la tapa de la antología y al escritor Pablo Albornoz de la Editorial de los cuatro vientos, quien editará el libro

Asimismo felicito a mi colega María del Rosario Lorenzo, quien obtuvo Quinta mención de honor con su prosa "DOS VISITAS PARA EL JULIÁN", y Primera mención especial en poesía, con el trabajo "Maestra rural"
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La carta

Sonó el timbre muy temprano esa mañana. Ella se había levantado a las siete como todos los días, pero algo le decía que no iba a ser un día más. Se puso sobre los hombros el chal tejido para cruzar el patio, y fue hacia la puerta de entrada. Abrió  el postigo de la puerta de calle y tomó el sobre que le entregó el cartero.

-          ¡Buen día, Camila, esta vez no es una factura para pagar, viste?

-          Así parece, gracias!

Cerró el postigo y se acomodó el chal. Miró el sobre . Le dio la vuelta una y otra vez. El destinatario estaba escrito en letras de computadora, así que no reconoció de quien era la carta. Pocas veces recibía algo personal,, más que las facturas de servicios que pagaba puntualmente. Tembló un poco, pero lo dejó sobre la mesa del living, al lado de la lámpara que estaba encendida.

Siguió preparando el mate, tostó el pan del día anterior y se sentó, sin dejar de mirar el sobre. No se animaba a abrirlo. Pero tenía que hacerlo. Pasaban los minutos, el agua se enfriaba y el sobre seguía ahí, cerrado, al lado de la lámpara.

Se levantó y lo agarró con ambas manos. Lo dio vuelta. En el remitente solamente aparecía una dirección. Lo dejó otra vez sobre la mesa. No se animaba a abrirlo.

Le asustaban un poco las noticias que llegaban por carta. Aún hoy, que manejaba la notebook bastante bien, prefería comunicarse con su familia como antes, sentada frente al anotador y con letra clara y firme escribir una carta que doblaba prolijamente y colocaba en un sobre para llevar al correo.

Por fin, tomó coraje, miró por enésima vez de reojo . Apagó la cocina y se sentó.

Lo tomó en sus manos,  temblorosas y cortó el borde prolijamente con la tijera.

Extrajo el  papel y con él, una serie de fotografías en blanco y negro, otras sepia y unas pocas en color. El primer rostro que vio, la sorprendió. Era igual a ella. Desdobló la carta y comenzó a leerla sin perder un segundo. Ya estaba emocionada, aún sin saber lo que diría, pero lo intuía.

Cuando en el primer renglón leyó: “Hola hija”, supo que su búsqueda no había sido en vano. En unos segundos sabría por qué su madre la había dejado en aquel convento cuarenta años atrás.

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Camila Nievas, ejemplo

Excelsa, profunda, simple.

Como debe ser una maestra:

ímpetu total en sus entrañas

y la mayor entrega, su enseñanza.

Le nació el amor por las letras,

por dejar su legado en los niños:

creó escuelas, educó docentes,

 supo sembrar buenas simientes.

Cientos de  piedras tuvo su  camino,

bregó por la cultura y las virtudes,

muy atenta a la ilógica machista

a pesar de las vicisitudes.

Al final, sin cansancio en sus hombros,

hoy su nombre está grabado en la memoria.

Fue parte de la cultura entrerriana

y seguirá viviendo en nuestra historia

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Camila Nievas de Capdevila: (1878-1941). Docente, de gran capacidad organizativa y creadora. Fue directora de la Escuela Nº 2, Domingo Matheu, a la que convirtió en escuela modelo para el país.

Su revolución en el campo educativo empezó a ser frenada por funcionarios burocráticos; entonces renunció y pasó a enseñar en el Colegio Luis Clavarino.

Al mismo tiempo inició acciones tendientes a la emancipación del espíritu y de la inteligencia de las mujeres, que se hallaban limitadas por prejuicios y falta de oportunidades.

Camila Nievas era descendiente directa de los primeros pobladores blancos de Gualeguaychú, que habían llegado a mediados del siglo 18, cuando los indios Minuanes aún levantaban sus "piríes" (chozas) en la zona.

Ella falleció en Buenos Aires, pero sus restos fueron traídos y descansan en Gualeguaychú.

                                                         

Silvia