Escritora invitada: Mirta Serrano

 Un pequeño recuerdo.

Si de algo estoy segura es que de una piedra se puede encontrar el paraíso.

Alguna vez alguien descubrió algo. Quizá a unos les interesó y otros pasaron ignorantes de ese

hallazgo.

Por suerte hay un exquisito grupo de hombres y mujeres que con un granito de arena hacen

que se encuentren con restos arqueológicos u otros objetos que nos demuestran el rico

pasado de nuestro país.

Hay agrupaciones. Asociaciones y muchos autores que han expresado en sus libros el

reconocer esos sitios que con orgullo uno puede admirar.

Inclusive cada mes se hacen reuniones denominadas Jornadas de Historia y además se hacen

congresos. En diferentes partidos y localidades dónde el tema principal es la Historia en

diferentes momentos y a través de nombres: héroe y anónimos que uno va recuperando en

otros.

Museos que permanecen en pie. Casonas antiguas que nos hablan y cuentan historias. Parques

que formaron parte de lujosas mansiones ó terrenos luego parcelados. Allí anónimos y

famosos nos han transmitidos a pesar de los siglos una época gloriosa. Con defectos y virtudes.

Con olvidos y aciertos. Batallas. Fechas. Lugares emblemáticos.

El conservar esos sitios nos permite averiguar cómo se vivía antes. Qué se consumía. Qué se

hacía en la vida durante la siesta. ó en el momento de ocio.

Sé que hay gente que le tiene sin cuidado si en la cuadra siguiente de su casa vivió el Marquéz

de x. pero yo soy una de las fervientes defensoras de conservar lo antiguo. Nos permite saber

cómo se llegó hasta el dia de hoy. Y lo que es añejo se puede conservar basándonos en

cuidados de profesionales que han estudiado sobre el tema.

El día 1 de julio está instituido como el dia del Historiador. Es un mimo y una manera de

homenajear a todos los que nos dejaron su estudios. Su huella y su legajo de trabajo.

Fue declarado como mismo desde el año 2002 El congreso de la Nación y su recuerdo remite al

primer Triuvirato que a través de un decreto de 1812,asentado por un escrito con la finalidad

de perpetuar la memoria de héroes, anónimos y las virtudes de los hijos de América del sud y a

la época gloriosa de nuestra independencia civil.”

Me viene a la memoria, curiosa, nombres de muchísimos historiadores que hoy están

ausentes. Otros suplen y continúan con su identidad. Qué es parte de la nuestra.

Ellos han dedicado horas a estudiar e investigar muchas cosas que hoy conocemos gracias a su

paso. Con una pequeña curiosidad han abierto mares y océanos. Nos han dejado sus diarios.

libros. Leyendas y ganas que han contagiado a muchos de continuar sus glorias.

No olvidemos que hoy hay una corriente de Historia pintoresca que los demuestra a nuestros

antepasados como humanos y no tan perfectos como en la revista “Anteojito”. Donde era

correcto y a nadie le podías declarar tu opinión. La historia se ha desmitificando en detractores

y que en todo hay dos campanas. Pero para eso hay que hacer el camino de investigar. No

quedándose con una sola opinión.

Hay muchos aficionados que leemos. y hacemos estudios de nuestros propios descubrimientos

Siento un profundo orgullo cada visita a un museo ó centro neurálgico donde se vivió la

historia :la nuestra.

Agradezco la gente que conserva esos trofeos : fotos, archivos, cartas, y tantas cosas por

demás importantes. Pienso que en silencio podemos hacer Patria. Pero a su vez

comprometiéndonos

con nuestro pasado. Defendiendo el presente desde nuestro pequeño lugar.

Respetando a nuestros mayores, conservando los recuerdos de otras épocas podemos avanzar

sin olvidar de dónde venimos.

Mirta Serrano.

Escritora

Socia de Historiadores de Fondo de la Legua-Miembro fundador.