Poema: Lluvia

 

Lluvia

Sucumbe  la tarde a los delirios de la luna.

Una nube negra se balancea

anunciando lluvia.

Detrás, un cúmulo de niebla oscurece el camino,

la montaña tiembla.

Llueve.

Las palomas se refugian en los tilos

y los tordos aletean

despidiéndose.

Abajo, salpican las gotas

hacen ronda con los sapos

y las hormigas merodean

buscando refugio .

Se fue el día.

Llegó ella, vestida de rocío

para acompañarnos hasta el amanecer.

Quizá mañana, el sol

nos regale melodías,

nos cuente historias

Y hasta tal vez, aleje la tormenta

al menos por un rato.

Así es, lluvia y sol.

Armonía.

©Silvia Vázquez

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