Diploma de honor @forofemeninolatinoamericano, por el Homenaje a Alfonsina Storni
Muchas gracias, un placer haber participado.
La obra:
Decisiones
Es 25 de
octubre de 1938. La ventana está completamente abierta y el aire del mar me
llega a los pulmones. Es primavera, pero siento en el cuerpo un frío extraño
que me recorre, desde que supe la noticia.
Lo que más
preocupada me tiene es qué voy a hacer con
Alejandro. Va a estar tan solo que me asusta .
La brisa
se acentúa y se transforma en un viento helado, las olas se ponen bravas pero
la ventana sigue abierta.
Cae la noche.
Me siento en el sillón y acaricio la cabeza de mi hijo que lee un libro en el
comedor. Octubre ya, octubre con brotes vivos de flores todo a lo largo de la
costa, árboles añosos coloridos, olores suaves y eternos en mi memoria. Miro a
mi niño, recuerdo aquel día de abril. “Vital, moderna y libre” decía esa joven
muchacha que ya no existe. De libertad, solo esta, los dos en casa, juntos.
Me duelen
las manos, ya no quero escribir, cierro la ventana y miro la tarde que se esconde
detrás del mar. El mar, las olas, caracoles que van y vienen…
Me tiento
a salir pero prefiero guardarme hasta mañana.
“Yo soy
como la loba, ando sola y me río
Del
rebaño. El sustento me lo gano y es mío
Dondequiera
que sea, que yo tengo una mano
Que
sabe trabajar y un cerebro que es sano.”
Dormí muy
mal, Alejandro creo que sospecha de mi enfermedad. Es un joven inteligente,
pero no lo sabrá por mí.
Despierto
muy temprano. Me visto lentamente, casi olvido mi sombrero. Camino hacia la
escollera, la mañana todavía no despuntó. La arena es amarilla y las olas son
suaves a esta hora . Mi cabello corto y plateado se ensortija rebelde. Mi nariz
respingada huele sal, caracolas…
La nota ,
la nota…
Déjame
sola: oyes romper los brotes...
te
acuna un pie celeste desde arriba
y un
pájaro te traza unos compases
para que olvides... Gracias... Ah, un encargo:
si él
llama nuevamente por teléfono
le
dices que no insista, que he salido.
Mi zapato
se engancha en las maderas, lo dejo ahí, ya no lo necesito, camino, me refresca
el mar, mi compañero de aventuras, me acompaña hasta el final, hasta el fondo,
hasta siempre…
Alfonsina
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