viernes, 6 de junio de 2025

Escritora invitada: Leonor Pires (tercera parte de El barrilete)




Mi madre no permitió que mi abuelo regresar a a su casa esa noche, hasta que el sol tibio de la mañana siguiente lo acompañara y dándole instrucciones de como debía cuidarse.

La semana siguiente se volvió interminable para mí, deseaba repetir la experiencia, pero
en vano lo esperamos, fuimos hasta su casa y estaba postrado, en cama,pálido. 
Berta, la mujer que cuidaba de él, llevó a mi madre a otra habitación, un presentimiento fatal
contrajo mis músculos, sentí un profundo dolor en el pecho, él me despidió con un abrazo di-
ferente al  de otras veces, sus ojos tremendamente azules se llenaron de lágrimas y dijo con
vos trémula. "Cuídate mucho y no dejes morir tus sueños y cuida al barrilete porque siempre 
nos mantendrá unidos."

Pocos días después mi abuelo dejaba este mundo. Fuimos al funeral, cuando lo ví en ese horrible féretro me sentí aterrado, erra la primera vez que veía la muerte de cerca, en su rostro ya frío apoyé mis labios sin sentir ya su usual cariñosa respuesta  .Quise llorar cuando ponían la pesada tapa, pero no pude, me resistía a creer lo que estaba pasando, con ella no sellarían nuestros sueños compartidos, sus enseñanzas, las ilusiones que él me había obsequiado. No le dije  adiós. Solo pensé "nos volveremos a ver en alguna estrella", no sabía cuando, pero sabía que así sería.

Regresamos a casa caminando lentamente, consternados: me encerré en mi cuarto, donde habíamos pasado momentos irrepetibles, en mi memoria emocional quedarían por siempre, la fragancia de la suave colonia que usaba, sus caricias, sus mimos, sus sabios consejos. Colgué el barrilete al lado de su fotogragía y quedó ahí por cinco años, lo acariciaba cada vez que su recuerdo me asaltaba.-

próximo  viernes el quinto y último capítulo de "El barrilete" Muchas gracias

©Leonor Pires
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1 comentario:

  1. Emocionante, verídico y con la sabiduría que da la vida!!!

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