Pañuelo blanco
Un pañuelo blanco voló. Soñaba que
navegabas en él como un príncipe encantado.
Volvías a buscarme para llevarme a tu
castillo encantado. Ahí me quedé, entre la sábanas de seda
que me acariciaban completa.
Al despertar, cuando la luz del sol se
metió por la ventana amaneciste a mi lado.
Puse la pava, preparé el mate y desayunamos
escuchando la radio que nos regalaron cuando nos
casamos.
El pañuelo estaba todavía colgado en la
soga del fondo.
Me levanté para planchar la parva de ropa
que quedó del fin de semana y vos, te fuiste a trabajar como todos los días.
©Silvia Vázquez
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario