Alejandro Golia enseña Teatro en la Sociedad de Fomento Morandi, en la Laguna de Lobos, a 112 km. de la Ciudad de Buenos Aires.
Si bien tanto la laguna, en realidad Villa Logüercio, es un
lugar pequeño, igual que Salvador María, donde vive el profesor, la gente se
entusiasmó con estas clases y concurre con muchas ganas.
¿Cuál es su formación y experiencia en el mundo del teatro?
En 1978 inicio el teatro vocacional. Me relaciono algunos
años después con dos maestros de teatro en
dirección y expresión corporal.
¿Qué lo inspiró a
dedicarse a la enseñanza del teatro?
Yo no enseño, en realidad, nadie puede enseñar a una persona
a ser actor. Se pueden dar herramientas y transmitir experiencias. Se tiene o
no el talento para ser actor, no se aprende.
¿Qué aspectos del teatro considera más importantes para
desarrollar en los estudiantes? L
La voz ,el cuerpo y la cara .
¿Cómo adapta sus clases a diferentes niveles de experiencia
y habilidades?
Como doy clases solo, comparto experiencias. Eso es algo
individual y trato con el personaje; la
persona actor me ayuda a conocer el personaje que da vida.
¿Qué tipo de
ejercicios y técnicas utiliza en sus clases?
Vocalización, relajación, textos, improvisación, desinhibición, manejo del cuerpo.
¿Cuál es el ambiente que busca crear en sus clases?
Confianza: encontrarse con uno mismo descubrir al personaje y dale
vida. Por sobre todo la confianza en que se puede hacer y la desinhibición total
para la realización del personaje .
¿Cómo evalúa el progreso de los estudiantes?
Si hacen algo cómico y
me río, o si hacen un drama y
lloro, me hacen felices, porque lograron
el objetivo del personaje
¿Cuál es la duración y la frecuencia de las clases?
No hay duración,
mínimo dos horas y frecuencia, hoy una
vez por semana y con vistas
a tres veces más cercano al
estreno.
¿Hay oportunidades para trabajar en escenas o proyectos más
extensos?
Dependiendo del
talento y la capacidad actoral de los que concurren al taller de teatro, sí. Todo
es arte, claro que hay limitantes,
por ejemplo: hoy
estoy en laguna de Lobos, Buenos Aires con un grupo de gente sin experiencia
teatral y con rango
etario de 30 a 78 años. lo que limita en algunos sexagenarios como yo, es la retención de
textos largos, y también al ser un grupo
de vecinos, limita algunas escenas que se podrían desarrollar. También es
limitante la poca cantidad de hombres (actores masculinos). Limitando a monólogos, u obras
con pocos actores y preferentemente donde los roles femeninos
sean mayoría.
¿Se exploran
diferentes géneros teatrales?
Sí, todos. Se
estudian todos los géneros y sub géneros para saber de qué se trata
una obra. También se estudian los personajes, los llevamos a la vida: cómo se viste, cuántos
años tiene, en qué año nació, qué día, le armamos un contexto familiar y
de amigos para conocer más a ese
personaje. Cuando el actor lo interpreta
ya lo conoce ya sabe quién ese personaje.
¿Habrá alguna
presentación o muestra al final del curso?
En teatro no hay final de curso, siempre y en cada personaje
se inicia otra vez. Sí, va a haber presentación en junio, clase abierta, siendo
la primera vez que van a pisar un escenario los concurrentes al taller. Será una
obra infantil para las vacaciones de invierno y día del niño y una obra para noviembre
de este año.
¿Qué consejos tiene para alguien que quiere dedicarse al
teatro profesionalmente?
Que estudie, tenga
una carrera u oficio y si la vida lo
lleva a vivir del teatro que lo disfrute. Muchos son los que quieren
vivir del teatro, pocos lo hacen. Algunos sobreviven y
solo unos pocos son estrellas (que
tampoco dura para siempre, las estrella
se apagan). Hay muchas otras formas
de vivir. Si hace teatro, disfrútelo,
vaya por la gloria, no por la
plata ni el oro. La gloria es contar
una historia, hacer reír, reflexionar o
hacer llorar. Una de las mejores
descripciones está en el prólogo de ”Las pequeñas historias para ser contadas” de Osvaldo Dragún, o el prólogo
de “Los interese creados”.
¿Cuál es el objetivo
principal de este curso en particular?
Reírse, divertirse, pasarla bien, jugar, hace niñerías,
dejar de ir al psicólogo tal vez. Pero
lo principal es saber que aún
podemos jugar y tenemos permiso para ser
felices.
¿Qué prerrequisitos o nivel de experiencia se recomiendan para este curso?
Ninguno
¿Cuál será la carga
de trabajo fuera de clase?
Depende de cada persona, y
el verdadero compromiso que asuma
con el grupo.
¿Cuál ha sido su experiencia más gratificante como profesor
de teatro?
La gratitud de los concurrentes , por ejemplo, “Gracias al taller de teatro he cambiado
mi vida y descubrí que
aun puedo ser feliz”. Ver a una
persona con una autoestima muy
baja, enfrentar la vida y
enfrentar un texto, una obra y al público. Ver a personas que
cambiaron su lamento por risas, o que
no se valoraban y gracias al
teatro son otros para mejor.
©Silvia Vázquez
exelente PROFESOR....estoy seguro que nos va a sacar actorazos de la Laguna de LOBOS...
ResponderEliminarMuy buen curso, es así tal cual como lo describe Alejandro! Es genial! Sean bienvenidos!!!
ResponderEliminarGracias Ale por tanto!
ResponderEliminar