El barco de papel
Remonta olas, lejos, allá lejos.
Ruedan las algas a su alrededor, invisibles,
plenas de recuerdos.
Encerrado en una botella que deja ver
los momentos vividos y soñados,
los que fueron parte de un pasado
y los que quieren ser borrados.
Se mueve mi barco de papel;
sube y baja lentamente:
Caracoles de colores se abrazan a sus velas
y conjugan un amor eterno
como aquel que alguna vez soñó
quien lleva el timón a cargo.
La sal, no puede penetrarlo,
el vidrio grueso de su botella
impide que lo dañen.
Así, de la misma manera,
un vidrio cubre mi corazón,
lo protege de los abrazos duros,
de los gritos tiernos.
Así remonto, suave, lenta,
Me zambullo en las aguas
de una vida plena,
Así, como viaja ese barco de papel dentro de una botella.
©Silvia Vázquez
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