viernes, 22 de abril de 2022

Entrevistas:Patricio Contrera, periodista y escritor: “No malgastes tu tiempo intentando recordar aquellas cosas que nunca te importaron de verdad”.




Patricio nació en la ciudad de Lobos, a poco más de 100 kms de CABA,  es periodista y ha sido redactor del diario online “Lobos 24”.  Ha formado parte de la Producción periodística integral e informes especiales en  www.lobos24.com.ar y también Cronista freelance de los siguientes medios: La Palabra, Periódico Lobos, El Cuarto Poder, diario La Mañana (de la localidad de 25 de Mayo). También ha sido pasante TN y La Nación (alrededor de tres meses en cada medio) y colaborador de revista alusiva a la colectividad argentina residente en Japón, publicada en CABA.

Pero hace muy poco, ha presentado su primer libro “Historias recortadas” en la Biblioteca Albino Capponi, de su ciudad.

¿A qué edad comenzaste a esbozar tus primeros escritos?

Cuando era chico, trataba de emular con una máquina de escribir Remington el estilo de los diario de la época, cuando todavía el soporte papel estaba en su apogeo y creo que ni yo ni nadie, en esa instancia, nos imaginábamos a que todo tipo de información en un futuro iba a estar alojado en una “nube”, por mencionar un ejemplo que la mayoría conoce. Redactaba noticias ficticias, inventadas, o bien tomaba alguna crónica real de algún diario considerado “serio”, y le daba otra forma. Pero fue en los últimos años de la Secundaria cuando sentí que era esto lo que quería hacer. El empujón final me lo dio una profesora de Lengua, que después de leer varias composiciones mías (ignoro si continúan llamándose así), me dijo “Vos tenés que ser periodista, o escritor”.

Aunque generalmente van juntas ambas profesiones ¿Qué fue primero, tu vocación de escritor o de periodista?

Es difícil de precisar, y muy oportuna la salvedad que hiciste en la pregunta, dado que ambas tienen mucho en común. Para ser periodista decidí formarme académicamente contra la resistencia inicial de mis padres que me sugirieron carreras más convencionales. Pero pese a todo, el apoyo que obtuve de ellos fue incondicional. Sé que se privaron de muchas cosas para que yo pudiera estudiar y no tener que trabajar al mismo tiempo. En resumen: Primero periodista, luego escritor, diría.

Como periodista ¿qué temas te interesan a la hora de escribir?

Las historias que llegan a la gente, la “rosca política”, recorrer los pasillos del Municipio o de las oficinas públicas buscando alguna data…es un ejercicio al que me fui acostumbrando. Ya llevo 20 años en esto, casi sin salir durante esas dos décadas de un pueblo por el cual tengo un ineludible sentido de pertenencia. Soy nacido y criado en Lobos. Pero nunca procuré ser indulgente o complaciente. El periodismo tal como yo lo concibo debe ser, ante todo, esclarecedor en la polémica, y a su vez uno puede publicar una nota que dé lugar a ella.

¿Qué cosas te inspiran?

Las ganas que tiene el vecino de a pie por superarse, ese efecto contagio de la buena onda que percibís en la calle, y el paso del tiempo es uno de los tópicos a los que suelo recurrir, pero sobre todo en la literatura. Un día sos joven, hasta que te mirás al espejo y sentís que pasaron veinte años. Pero estoy totalmente en contra de un ejercicio excesivo de la nostalgia.

¿Cuánto tiempo le dedicás a escribir?

Honestamente, no tengo horario. Siempre digo que cuando los demás descansan, yo trabajo. Por citar un caso, a la apertura de sesiones del Concejo Deliberante no concurre casi nadie, sin embargo yo debo hacerlo, y desde el vamos, sé que tengo un laburo promedio de dos horas para una sola nota. Esto incluye: Retocar y editar las fotos, seleccionar las que considero más logradas, desgrabar discursos, dialogar con los legisladores al término de la sesión. Puedo arrancar un día a las 21 hs y terminar a la medianoche, como también me ocurre que hay días que no hay absolutamente nada para publicar y hay que sacarle agua a las piedras, como suelo decir. Todos los días, el lector debe tener una noticia, puedo levantarla de algún medio nombrando la fuente, pero la producción periodística propia es lo que más me gusta hacer.

¿Cuáles son tus géneros preferidos?

Desde que le encontré la vuelta y que entendí cómo se maneja, al menos en los pueblos chicos, podría decir que la política y las notas de interés general.

¿ Cómo ves la literatura actual en tu ciudad?

Hay muchos escritores jóvenes y talentosos, que tienen un futuro promisorio y que no ven a la publicación de un libro como un gasto. Están aquellos que han publicado una obra por darse un gusto personal, y otros que han alcanzado una continuidad. Siempre consideré que la vida en sí misma el 90 % esfuerzo y 10 % talento. Porque el talento es una supuesta capacidad innata, pero si no lo pulís permanece como un diamante en bruto y puede seguir así por tiempo indeterminado.

Tu libro habla ciertas partes de la ciudad donde vivís. Cada página cuenta una historia nueva.¿Considerás que las historias pueden darle al lector una idea de cómo es la ciudad?

Hay pinceladas de la vida pueblerina, sí, y también, por una licencia literaria, evité nombrar lugares específicos excepto que, mientras escribía, lo creía necesario para darle un anclaje a cada relato. Los nombres de las calles, en su mayoría, son totalmente inventados, y las locaciones no son reales, pero estoy convencido de que los lectores lobenses, al menos, se sentirán identificados en ese sentido.

¿Qué autores son los que más te atrapan?

Mirá, hay muchos que fueron injustamente olvidados, como Beatriz Guido, quien fue esposa del cineasta Leopoldo Torre Nilsson. Vos leés “Fin de fiesta”, por ejemplo, y es un libro que te atrapa,porque debe tener 50 o 60 años y habla de la corrupción en la política. Guido sabía escribir, no es el caso de Silvina Bullrich que todos los años metía un best seller porque encontró la fórmula para hacer un libro que venda. Osvaldo Soriano es genial, lo admiro muchísimo. Cortázar me gustó desde la primera lectura, y hasta el día de hoy me gusta más que Borges. Y si me preguntás por escritores de afuera, te puedo nombrar a Paul Auster o Martin Amis. 

¿ Pensás que la literatura argentina está a un nivel alto con respeto a la del resto del mundo?

No lo sé, porque probablemente en el resto del mundo también se editen libros de pésima calidad literaria. Pero, hablando de historias de inspiran, tenés el caso de Aurora Venturini, un éxito editorial, la crítica especializada se rindió a sus pies cuando ganó aquel certamen literario de Página/12. Una mujer que obtuvo un reconocimiento pasados los 80 años, lo cual por una veta comercial naturalmente motivó la reedición de toda su bibliografía anterior… en fin, es un fenómeno para pensar y que no deja de sorprenderme.

¿Qué  personaje literario te hubiera gustado ser? Y por qué?

Alguno de Rayuela, seguramente, del Club de la Serpiente, porque me gusta mucho el jazz y la afición que Cortázar tenía por ese género puede rastrearse como decididamente influyente en varias de sus obras.

Si pudieras sentarte a tomar un café con un escritor , ¿qué le preguntarías?

Más que preguntarle algo, aunque bien podría hacerlo en modo de pregunta, le pediría un consejo que me aliente a seguir escribiendo y a mejorar mi calidad literaria.

Una frase que repetís a diario

“No malgastes tu tiempo intentando recordar aquellas cosas que nunca te importaron de verdad”. No sé si la leí en algún lado, pero creo que la inventé yo.

¿Cómo se consigue tu libro?

Para quienes no son de Lobos, una buena opción es la de contactarse personalmente conmigo enviándome un mail a ingleslobos@gmail.com, o bien un mensaje de FB por inbox. La Editorial que publicó el ejemplar, Luna de Marzo, tiene un local en la zona céntrica de la ciudad (calle Buenos Aires 262), donde aún quedan ejemplares disponibles. O si no, en librería Estilo, también de Lobos. 

Me han pedido libros desde algunos puntos lejanos, pero quiero interiorizarme bien acerca del costo de envío en caso de que sea por vía postal, para evitar encarecer el costo al comprador. El costo es de 1.200 pesos.



©Silvia Vázquez

...............





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario

23 DE ABRIL DIA DEL LIBRO