MIRNA Y EL HOMBRE DE LA ROSA...
Un hombre de traje oscuro,
con sombrero, por demás elegante,
visitaba todos los jueves,
a Mirna, la costurera de mi barrio...
El caballero llegaba puntualmente,
cuando Mirna terminaba sus tareas,
el joven la acompañaba hasta su casa,
y conversaban de bellas historias de amor...
Cada jueves el caballero traía,
una rosa para la costurera,
que caminaba junto a su príncipe,
Mirna esperaba los jueves,
para caminar junto a su amado,
era como su ritual,
un festejo para su amor enamorado...
Guardaba todas las rosas,
entre las amarillas hojas de sus libros,
con los memorables y preciados poemas,
de sus queridos Cervantes y Bécquer...
Luego del paseo de la tarde,
al regresar a la casa de Mirna,
tomaban juntos un café,
acompañado de un licor de mandarinas...
Las charlas eran interminables,
y el tiempo volaba con ellas,
una cena, una velada hermosa,
y un idilio del amor de una novela...
Jueves tras jueves se repetía esta historia,
de un amor entre rosas y puntadas,
entre maniquíes, telas y café,
de un hombre con una rosa y Mirna, la costurera fiel...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario